Manfredo es un pequeño bar, ubicado sobre la avenida de Mayo, en el corazón de Ramos Mejía, al oeste del Conurbano bonaerense. Llegar al lugar es encontrar una ostensiva señal de que te encontrás ante el recinto más frecuentado por los músicos en el Oeste. Conviven guitarras, cervezas con maní, y muchachos (y no tanto). Rockeros, punks, stoners, hippies. De todo y en mucha variedad. En ese abigarrado universo hecho bar, hablamos con Bittrox. Cinco chicos de Lomas del Mirador y Capital que hacen canciones pop. O rock. O ambas. Pablo Bernis en voz y guitarras, “Guishe” en baterías, Fernando Castillo en piano/ teclados, Leandro Zorzenon en bajo y Diego López en guitarra conforman este quinteto en un territorio “liderado” por el rock barrial y el reggae por citar algunos ejemplos. Y Bittrox justamente es todo lo contrario. Con dos EPS cantados íntegramente en inglés, Go Around y Bittrox editados entre el 2006 y el 2008, Bittrox significó una renovación musical para una banda con estelas brit pop y grunge. Luego llegó el 2010, y un mes antes de la llegada del 2011 lanzaron su primer disco de estudio “Nocturnea”, con la producción de Bicicletas y el aporte de Andrea Alvarez en dos tracks. Bittrox cambiaba, maduraba más. Los chicos abandonaban las letras en inglés por textos en castellano. Pero siempre con el rock como bandera.
Entre guitarras y sintetizadores, Bittrox presentó en los primeros meses del 2011 Nocturnea. Tocaron en fiestas y clubes de capital federal como en el Roxy Club y también en el Conurbano: durante mayo compartieron fechas junto a Adicta, El mató a un Policía Motorizado y Banda de turistas en shows que invitaban a mover la patita al escucha.
“Somos bastantes predispuestos al cambio, nos sale natural. En nuestro caso, la transición entre los discos en inglés y el último se dio por una cuestión de influencias nuevas. Así a mediados del 2009 comenzó la producción de Nocturnea, en base a lo que nosotros queríamos”, cuenta Fer Castillo.
- ¿Por qué Nocturnea?
“Escuchamos el disco, con las letras y nos pareció que sonaba a algo más nocturno, donde plasmábamos nuestras vivencias”, detalla Guishe. Y algo de eso hay porque en su reciente álbum, la nocturnidad es su impronta y ese es el concepto que deambula todo el disco y sus canciones. Al menos eso deja a entrever su primer corte de difusión Guerra en Ego: un tema muy bailable cuyo protagonista parece que luchara contra sí mismo y no con su chica (¿o sí?). O en Hoy nací podría tratarse de un desencuentro en cualquier suburbio nocturno: yo nací/yo nací para terminar/ no queda nada por creer. O en Así nomás te recordaré no sos mejor que yo/quizás me odiaste por demás/ donde así nomás, los interlocutores intuyen que podría tratarse también de una fémina dando vueltas por ahí (o no).
- En Nocturnea abandonan las letras en castellano ¿Cómo fue la decisión?
- “El tema de las letras en castellano lo veníamos pensando hace un tiempo por una cuestión de que ya se caía de maduro. Representaba un desafío y era más fácil escribirlas en castellano por un tema de fonética. Justo ahí vinieron los chicos de Bicicletas (Julio Crivelli e Ignacio Valdez, productores artísticos de Nocturnea) y nos sugirieron que hagamos todo en castellano. Ahí que tomamos la decisión de hacerlo y empezamos”, relata Pablo.
Alguna vez los chicos de Bittrox confesaron que escriben canciones salvajes. De salvajismo puro. Emanaciones eléctricas de rock y baile. Y ciertamente, es así.
Por Yanina Fuggetta
Fotos: Andee Astrada